Compartir

miércoles, 14 de octubre de 2015

Economía colaborativa e innovación distribuida


Para leer este artículo te recomiendo:


Por primera vez desde la Revolución Industrial, las aportaciones más significativas a algunos de los sectores económicos más importantes de la economía se encuentran radicalmente distribuidas entre la población.
Nuevos modelos de producción social impulsados por el aumento de la tecnología, han reducido enormemente los costes de transacción , haciendo que ofrecer activos para el intercambio sea hoy más fácil que nunca, y a una escala mucho mayor que antes. Y no sólo para las personas: la web hace que sea más fácil para las empresas alquilar máquinas y oficinas haciendo un uso más eficiente de sus recursos. 
En sentido literal, podemos hablar de una economía de red que se refuerza mediante su uso, ya que su su funcionamiento mejora conforme se incorpora más gente y nuevos hábitos y , por lo tanto, es una actividad con coste marginal cero.
Por otra parte, cada vez más en la teoría y en la práctica de los negocios estamos detectando un cambio hacia una serie de técnicas de innovación y producción abiertas, técnicas basadas en la idea de que nunca podemos dar por sentado que la persona o el recurso idóneos para una tarea determinada son ya empleados nuestros o individuos con los que tenemos ya una relación contractual bien definida. 

  


Por ejemplo, la economía colaborativa ha sido ampliamente aclamada como un sector de crecimiento importante, proporcionando a los consumidores un acceso conveniente y eficiente a determinados recursos libres de las cargas financieras, emocionales y sociales de la propiedad. 
Estamos ante un nuevo contexto en el que los consumidores simplemente quieren hacer compras inteligentes y las empresas que desarrollan su modelo de negocio bajo el paraguas de share economy les permiten lograr ese objetivo, ofreciéndoles una mayor comodidad a un menor precio.
El mayor cambio para las estructuras tradicionales es la ruptura de la distinción entre empresas y clientes. Los modelos peer-to-peer están dando a los consumidores la oportunidad de convertirse en empresarios a tiempo parcial, temporal y flexible. Modelos como Airbnb, Uber, Dogvacy, HomeDine y Getaround permiten a sus usuarios tanto el ahorro de tiempo y dinero, como la creación de su propia microempresa.



Una de las consecuencias más importantes de la innovación tecnológica y de la alta diversidad de las fuentes de incertidumbre que están caracterizando a los mercados globales, ha sido el auge de la producción entre pares: compromisos colaborativos a gran escala por parte de grupos de individuos que unen fuerzas para producir artículos más complejos de los que habrían sido capaces de crear de manera individual (Wikipedia, Linux, Apache...). 
La producción entre pares es la innovación organizativa más significativa de todas las surgidas de las prácticas sociales posibilitadas por internet. Dicho modelo se basa en la experimentación y la adaptación a un entorno cambiante y muy incierto haciendo hincapié en la innovación, la flexibilidad y la robustez por encima de la eficiencia. El rasgo principal de este nuevo sistema es la colaboración entre grandes grupos de personas, que cooperan de una manera efectiva para proporcionar información, conocimiento o bienes culturales sin depender de precios de mercado o de las jerarquías gerenciales para coordinar su funcionamiento y con una reducción significativa de los costes de transacción. A cambio de perder algo de control y gobernabilidad. 



La contribución clave de la economía colaborativa es la de superar las imperfecciones del mercado sin recurrir a las formas tradicionales de regulación. Lo que está haciendo que se cuestione el modelo de producción capitalista convencional.
La economía colaborativa y la producción entre pares son claros ejemplos de una mayor amplitud de estrategias que se benefician de la libertad de operar típica de estos dos enfoques, renunciando a la jerarquía y al sistema de propiedad individual que muchas organizaciones tradicionales se esfuerzan por conservar. Su efecto combinado dará como resultado que muy pocas cosas volverán a ser como antes. En primer lugar, porque permite hacer cosas que antes no se podían hacer, pero también porque revoluciona el estatus de muchos sectores establecidos de actividad. Lo que requiere de una adaptación de nuestros conocimientos a estos nuevos comportamientos de mercado. Si es que queremos seguir compitiendo con un mínimo de garantía de éxito en los próximos años...